El doctor me recomendó hacer deporte, pero no tengo con quien hacerlo. Me siento ridículo salir a correr solo, me siento observado, tengo esa extraña paranoia, como si las personas apuntaran sus vistas hacia mí.
Mi esposa me ha dicho que me podría acompañar a un gimnasio, pero con estos meses que tiene de embarazo, esta con nauseas y bueno, yo no quiero que se sienta mal.
He recordado que soy malo para las dietas y las rutinas. Que despertar temprano para salir a correr iniciaría bien, pero se tornaría aburrido luego y nunca faltan esos dolores de primeros días. Esos dolores a los músculos que a veces no puedes ni moverte.
Ahora que lo pienso, sí sigo una rutina, despertarme todos los días a la misma hora, salir por una quinua, comprarme el periódico y enterarme de algunos temas de interés que me sirven como ideas para escribir. Mi vida aparenta ser tranquila, algo aburrida, pero según dicen algunas personas, me envidian.
Últimamente que salgo muy temprano a caminar, me encuentro con una perra, es bonita, esta algo descuidada, sucia, pero con un buen baño quedaría una mascota envidiada. Mi esposa les tiene miedo a los perros y me ha dicho que no le dé nada de comida, ya que se acostumbrara y me seguirá a todos lados, pero cada vez que puedo le llevo algo para que vaya comiendo.
Recuerdo que en mi primera cita ella vio a un grupo de perros cerca donde caminábamos y me abrazo muy fuerte, entonces me dijo:
-No me sueltes por favor, no me sueltes, los perros sienten el miedo (nerviosa)
Fue verla y sentirla tan tierna, indefensa, sentir que ella necesitaba protección, pienso que fue ahí cuando me comenzó a gustar. Aun no sé las he descrito, pero mi esposa tiene unos risos largos, es morena, tiene una sonrisa que fácilmente incendiaria el mundo y para mi es hermosa.
Tenía las ganas de cuidar a la perrita que encontré, a quien puse de cariño Sasha Grey, a los que no saben el porqué del nombre, bueno ese nombre pertenece a una actriz del cine erótico pornográfico. Yo he sido fanático de ciertas películas, de las cuales han sido como consecuencias mis primeras alucinaciones.
He despertado muy temprano para buscar a Sasha, quiero bañarla, dejarla limpia y sin pulgas. El señor del periódico me dijo que la vío rumbo al mercado, a lo mejor se fue por sobras pero igual la buscaré.
Ahora que lo pienso ya encontré compañía para hacer ejercicio, una compañera, una que encontré de casualidad cuando salí en una rutina de las que tanto odié.
A María le comenté que cuidaría de Sasha le dije que era por mi salud y en un primer momento se negó. Cuando le presenté a la perrita, sintió miedo al inicio, pero después comenzaron a jugar.
Es extraño, muchas personas se preocupan en encontrar para comprar a perros de razas finas y yo encontré a una compañera ideal justo cerca donde tomaba mi quinua de cada día. Sasha Grey mi perra.
Aquí les dejo parte de la letra de la canción del maestro Lino Bolaños, llamada el perro:
“Los perros no tienen alma
Nos dice la teología
Yo creo que se equivoca,
Mi perro sí la tenía
No tiene alma quien cree
Que el alma no es alegría
Yo le contaba secretos
Y le hablaba de mujeres
Yo creo que sonreía
Aunque eso nadie me cree
El alma puesta en la cola
Y el corazón en los dientes”
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